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Condenación de la Idolatría
1 Y vino a mí la palabra del Señor:
2 “Hijo de hombre, pon tu rostro hacia los montes de Israel, profetiza contra ellos,
3 y di: ‘Montes de Israel, escuchen la palabra del Señor Dios. Así dice el Señor Dios a los montes, las colinas, las barrancas y a los valles: “Yo mismo traeré sobre ustedes la espada y destruiré sus lugares altos.
4 Sus altares serán devastados, sus altares de incienso serán destrozados y haré que caigan sus muertos delante de sus ídolos.
5 También pondré los cadáveres de los Israelitas delante de sus ídolos, y esparciré sus huesos alrededor de sus altares.
6 Dondequiera que ustedes tengan sus moradas, las ciudades quedarán desoladas y los lugares altos devastados, para que queden desolados y devastados sus altares, rotos y eliminados sus ídolos, derribados sus altares de incienso y borradas sus obras.
7 Los muertos caerán en medio de ustedes, y sabrán que Yo soy el Señor.
8 Sin embargo dejaré un remanente, porque tendrán entre las naciones a los que escaparon de la espada cuando estén esparcidos por las tierras.
9 Entonces los que de ustedes escapen Me recordarán entre las naciones adonde serán llevados cautivos. Porque he sufrido a causa de sus corazones adúlteros que se apartaron de Mí, y a causa de sus ojos que se prostituyeron tras sus ídolos. Pero se aborrecerán a sí mismos por los males que han cometido, por todas sus abominaciones.
10 Y sabrán que Yo soy el Señor; no en vano he dicho que les haría este mal.” ’
11 “Así dice el Señor Dios: ‘Bate tus manos, golpea con tu pie, y di: “¡Ay!, a causa de todas las graves abominaciones de la casa de Israel, que a espada, de hambre y de pestilencia caerán.
12 El que esté lejos morirá de pestilencia, el que esté cerca caerá a espada, y el que quede y esté sitiado morirá de hambre. Así desahogaré Mi furor sobre ellos.
13 Entonces ustedes sabrán que Yo soy el Señor, cuando sus muertos estén en medio de sus ídolos alrededor de sus altares, en toda colina elevada, en todas las cumbres de los montes, bajo todo árbol verde y bajo toda encina frondosa, lugares donde ofrecían aroma agradable a todos sus ídolos.
14 Así que por todas sus moradas extenderé Mi mano contra ellos, y haré la tierra más desolada y devastada que el desierto hacia Diblat; y sabrán que Yo soy el Señor.” ’ ”